domingo, 9 de enero de 2011

Los libros de texto, ¿amigos del profesor?

Llevo poco más de un año en enseñanza secundaria, por lo que me he perdido la evolución de los contenidos de los libros de texto desde que yo hice mi BUP hasta hoy en día.... En concreto los libros de idiomas extranjeros. Ha llovido lo suyo. Además no enseño en España.

A mí este libro de español me cae gordo. Casi desde que empecé. No puedo poner el dedo en la llaga, pero algo no me cuadra. Me resulta muy difícil trabajar con él. Puede ser que no haya aprendido aún a sacarle partido, ya que el resto del departamento está encantado, y un amigo de un amigo en otro colegio también.

Con la nueva unidad, titulada "A clase", mi aversión ha crecido. El tema es la educación, el "insti", como una y otra vez aparece escrito en el libro. El enfoque que se le da al tema me parece lamentable: parece que los autores hayan pretendido ganarse la simpatía del adolescente identificándose con lo que suponen que sufre en su "insti": jo, qué rollo, qué difícil es todo, odio mi horario, odio el insti. Topicazoa a porrillo, las asignaturas gustan si son fáciles y divertidas, y son odiadas si son difíciles o aburridas; "Me encanta el teatro porque es divertido". "No me gusta nada la informática porque no es fácil", "Odio la geografía porque es aburrida", etc.  La palma se la lleva la siguiente perla extraída de la sección dedicada a los profesores, un texto para la comprensión lectora y para presentar diferentes formas de expresar opiniones:

(Carta/correo de Jorge a su amiga inglesa Jade)
"Hola Jade. ¿Qué tal tu colegio en Inglaterra? Yo no estoy muy contento este curso aquí en Madrid porque tenemos una profesora nueva de ciencias, la señora Torres. Me cae fatal. Me parece que es una pesada y es demasiado severa. No estoy de acuerdo con su manera de enseñar. Por ejemplo, el martes pasado hablé con mi compañero porque no entendía sus explicaciones y se enfadó conmigo. Para mí que está loca. Después me quedé sin recreo porque no terminé el ejercicio. ¡No es justo! Creo que la señora Torres es mucho más exigente que el señor López (el profesor de ciencias de antes). También nos pone demasiados deberes. Ayer en clase no nos dejó hablár ni trabajar en equipo. ¡Tuvimos que escribir una lista con las normas del instituto! Estoy harto de sus clases porque la señora Torres es realmente una tía paliza".

Yo no tengo por dónde coger esto. Aparte de no ser un texto real, ni escrito por un adolescente español (¿Quién llama señora Torres o señor López a sus profesores en un instituto? Nombre de pila, que yo sepa, como mucho aún don y doña en los privados o concertados si acaso, no sé.), me causa un estupor enorme, por decirlo de un modo fino, que se concentren tantas opiniones negativas hacia un docente en tan poco espacio. Estereotipadas. Además tiene que haber un profesor que les caiga bien, aunque sea exigente. Puestos a aprender epítetos, mejor positivos ¿no?

En fin, que ya me buscaré otra manera de que aprendan a dar opiniones en español, pero desde luego este texto no.